Gemma Haughton encontró a su hijo de doce años inconsciente en su habitación, de una casa de Birmingham. Desesperada, llevo a Karnel al hospital pero fue demasiado tarde, el adolescente murió ahogado.
El choking game o juego de la asfixia es un reto que ya existía de hace tiempo, ahora está volviendo a cobrar popularidad a través de Internet.
EL DESAFÍO SE BASA EN PERDER EL CONOCIMIENTO PARA SENTIR UN MOMENTO DE EUFORIA TEMPORAL; MUCHOS JÓVENES LO HACEN EN GRUPO O A SOLAS PORQUE LO CONSIDERAN “MÁS SEGURO” QUE INGERIR DROGAS.
Bee Bailey, la mejor amiga de Gemma, asegura que Karnel era un chico muy ingenioso y feliz. Era cercano a sus hermanos y tenía un montón de amigos en la escuela. No había una razón para que perdiera la vida.
“Es muy importante que hables con sus hijos para que sepan que una de las consecuencias que pueden acarrear estos juegos de Internet es, tristemente, la muerte”, lamentó Bee.
A pesar del dolor, la familia Haughton está dispuesta a compartir su historia para que otros padres sepan el peligro que este juego puede significar para sus hijos y prevengan una tragedia.
Más de 400 jóvenes han muerto a causa de esta deleznable práctica en Estados Unidos.
